Llamamos aquí la atención acerca de la distorsión y mala compresión que generan algunos valores. A veces, la distorsión proviene de la falta de información o de la inmadurez de Conciencia, pero muchas veces forma parte de los auto-engaños para no asumir responsabilidades, encubrir miedos, extraer beneficios egoístas y un sinnúmero de otras causas.
La Libertad
Tomaremos como ejemplo la Libertad. Se trata de un Valor esencial al ser humano que no puede prescindir de los límites. Por ejemplo, la libertad de expresión es un derecho, uno de los grandes principios que la Humanidad ha luchado por instaurar, pero no puede expresarse en términos absolutos: “digo lo que quiero o expreso lo que quiero porque es mi derecho y soy libre”. Esta frase es muy típica en los adolescentes. Aquello que expresamos necesita manifestarse en forma responsable, teniendo en cuenta los efectos que podemos causar en el otro con nuestros actos y palabras.
Si por libertad de expresión entendemos la libertad para hacer bromas sobre una religión diferente a la nuestra, por ejemplo, los efectos que podemos causar en personas sensibles pero inofensivas, será rabia, malestar, tristeza y en aquellas más primitivas, quizá generemos violencia. Hay que medir las consecuencias. El ser libres nos hace fraternos y responsables. Poseemos derechos, pero los demás también y es importante respetarlos. Nuestros pensamientos, actos y palabras tienen consecuencias.
